30 de agosto: la desaparición forzada es el más cruel de los crímenes contra el ser humano
El Equipo Peruano de Antropología Forense (EPAF), institución que ha trabajado por más de una década ayudando a esclarecer casos de desaparición forzada ocurridos en nuestro país durante la violencia política (1980-2000), desea hoy 30 de agosto, Día Mundial de las Víctimas de Desaparición Forzada, manifestar lo siguiente:
Han pasado 9 años desde la presentación del Informe Final de la Comisión de la Verdad y Reconciliación (CVR), y aunque llevamos ya tres administraciones en el Poder Ejecutivo, los avances en materia de verdad, justicia y reparación para los sobrevivientes de la violencia y los familiares de las víctimas han sido escasos.
Por el contrario, en muchos aspectos relacionados con las consecuencias sociales de la violencia política, observamos una preocupante desidia por parte del Estado. A pesar de la retórica política sobre pequeños avances logrados en esta materia, lo cierto es que para una abrumadora mayoría de casos no hay esclarecimiento, rendición de cuentas ni reparación.
Por ello, una vez más, EPAF insiste en la necesidad de un Plan Nacional de Búsqueda de Personas Desaparecidas que permita coordinar esfuerzos y recursos por parte del Estado y la sociedad civil para iniciar una búsqueda sistemática de las más de 15 000 víctimas de desaparición forzada en el Perú. No se trata simplemente de realizar exhumaciones; es necesario devolver la identidad a los desaparecidos, establecer las circunstancias de su detención y muerte para su judicialización, y restituir los restos óseos a sus seres queridos.
Invertir tiempo y recursos en iniciativas que garanticen la impunidad como costear pericias de parte que favorecen a presuntos violadores de derechos humanos, sentencias benignas o absolutorias, iniciativas legales para imponer un pensamiento único respecto de la violencia sin reconocer la participación del Estado en crímenes de lesa humanidad, no harán posible reconciliación alguna.
EPAF reitera así su compromiso con todas las víctimas de violaciones a los derechos humanos, especialmente las víctimas de desaparición forzada, contribuyendo a que las víctimas y sus familiares alcancen la verdad y la justicia que tanto merecen y desean.
Lima, 30 de agosto del 2012.